Páginas

¡BIENVENID@!

¡BIENVENID@!

En este blog encontrarás las recetas que he ido descubriendo, adaptando, reinventando o creando… sin trigo, sin levaduras ni lácteos. Lo que en principio parece una limitación, se puede convertir, con un poco de cariño, imaginación y ganas de experimentar cosas nuevas en un reto apasionante que permite descubrir ingredientes y sabores antes desconocidos y ensanchar los horizontes de nuestra cocina de forma saludable y sabrosa... haciéndonos sentir que el mejor restaurante está en nuestra propia casa.

martes, 22 de abril de 2014

Risotto de Setas (SG//VG)




Este es un plato sencillo pero muy sabroso. Eso sí, no es para los días que andamos con prisa en la cocina, pues exige dedicación plena: si estás al risotto no estás a nada más…


Las características distintivas de este risotto son el aceite de trufa y el “queso” cremoso de anacardos. Ambos caseros, potencian su sabor de forma deliciosa. Por supuesto, en su defecto se pueden sustituir (como se puede ver en la lista de ingredientes) pero el resultado, aún siendo bueno, es inferior. 


INGREDIENTES: (Para 4 personas)

-       2 cucharadas de aceite de trufa casero (ver receta aquí), o aceite de oliva (v.e.)
-       1 cebolla mediana, picada fina
-       300 gr de setas (yo utilizo una combinación de champiñones –blanco y Portobello- con setas shiitake frescas, pero utilizando mucha menos cantidad de éstas que de los primeros; en temporada, se pueden utilizar setas silvestres)
-       1 y ½ l. de caldo de verduras casero, caliente
-       2 dientes de ajo, machacados
-       400 gr de arroz arborio
-       160 ml de vino blanco seco (es decir, no dulce)
-       “Queso” cremoso de anacardos de sabor suave (ver receta aquí) o nata vegetal
-       Perejil fresco, picado fino


ELABORACIÓN:

Llevar el caldo de verduras a ebullición y reservar tapado para que retenga el calor.

Poner el aceite en una cazuela baja y ancha y rehogar en él la cebolla y el ajo hasta que la primera esté transparente y blandita.

Incorporar las setas y champiñones y rehogar despacio hasta que se ablanden. Agregar el arroz, dar unas vueltas y añadir el vino, manteniendo el fuego bajo y removiendo con frecuencia hasta que se consuma el alcohol.

Añadir uno o dos cacillos de caldo y cocinar removiendo a fuego lento hasta que se absorba el líquido. Ir añadiendo caldo cacillo a cacillo, sin dejar de remover, esperando a que se absorba el líquido cada vez, hasta que el arroz esté tierno y el conjunto cremoso.

Retirar del fuego, mezclar con “queso cremoso” de anacardos al gusto y el perejil, decorar al gusto y servir enseguida. Presentar con un bol de “queso” por si alguien quiere añadir más (yo prefiero mezclar poca cantidad antes de servir y que luego cada uno decida).

4 comentarios:

  1. Qué pintaza tu risotto Fantasìa, me muero de ganas. Me anoto tu idea diferente y con personalidad.
    Besitos y felices dìas

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola Chusa! Me alegra mucho que te guste, a ti que vives en el país de los risottos... ;) Un abrazo y que tengas muy buen día tú también.

      Eliminar
  2. Fantástico risotto, tendré que probar con el aceite y el queso cremoso. Yo nunca le echo queso al risotto, prefiero sacar la melosidad a base de darle vueltas y más vueltas. Un besazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola Geles! No, tienes toda la razón, no hace falta añadirle el queso para hacerlo más cremoso, pero le añade un matiz diferente de sabor. Un abrazo.

      Eliminar

¿Te animas a dejarme un comentario?